El ingeniero Rubén Sanabria, de la Coordinadora Agrícola del Paraguay, explicó que la cosecha se inicia muy esperanzados en el rendimiento, el cual por el momento es promedio, pero apuntan a mejorar. “Estamos empezando. Las primeras parcelas dieron un rendimiento promedio de 2.500 kilos por hectárea. Ahora estamos mejorando por los 3.000 kilos por hectárea. Es buena, aunque pensamos a mejorar”, expresó el productor del Este del país.
Agregó que en total se cuenta en Alto Paraná 860 mil hectáreas, y que actualmente se está cosechando un 30 por ciento, en un principio. En tanto, pese a que el rendimiento no es óptimo, es mucho mejor comparado al año anterior.
“El año pasado, la producción fue la peor de todos los tiempos. Este año queremos revertir para cumplir con los compromisos financieros e invertir para producir mejor”, añadió el ingeniero.
El año 2022 fue catastrófico para el sector, debido a la sequía. El año pasado, se reportó una pérdida del 70% de la producción a nivel nacional, lo que generó un impacto negativo en el productor. La campaña de entrezafra, tanto de soja y maíz, a nivel macro, amortiguó un poco el golpe y permitió la recuperación, en parte, tanto del productor como del país, en términos económicos.
DE BUENA A MUY BUENA
La representante de la Cámara Paraguaya de Exportadores (CAPECO), María Luisa Ramírez, refirió que la expectativa es que esta campaña vaya de buena a muy buena. Sin embargo, advirtió que no será una “súper campaña”, y que “hay una tendencia que los rendimientos vayan mejorando a medida que avance la cosecha”.
Detalló que la cosecha a buen ritmo comenzó a mediados de febrero recién, y eso permite tener un mejor panorama en cuanto al rendimiento.
“Las lluvias en grandes cantidades podrían tener un impacto positivo en sojales que están todavía verde, en proceso de crecimiento y maduración, no así en los que están listos para ser cosechados”, manifestó.
Con relación a la economía doméstica, varios analistas y agentes del mercado indican que la recuperación macroeconómica estaría liderada por la buena producción de la soja.
SEQUÍA 2021-2022
Implacable fue la sequía que atravesaron los cultivos de soja, que ocasionó que el país pierda dos lugares en el ranking de mayores exportadores de la oleaginosa, informó la Capeco. En total, la producción de la zafra 2021-22 alcanzó los 4,3 millones de toneladas, en comparación a los 10 millones esperadas al inicio de la zafra, repercutiendo en menores envíos.
En cuanto a las salidas totales del grano, se contabilizaron las 2.334.309 toneladas frente a las 6.329.425 toneladas de la campaña anterior. “Esto llevó a que el país baje dos lugares en el ranking mundial, pasando del 4º al 6º exportador y de ser el 6º productor al 8º productor mundial de soja”, mencionó Sonia Tomassone, asesora de Comercio Exterior de Capeco, en el más reciente informe emitido por gremio.
En ese sentido, indicó que la disminución de divisas en concepto de embarques del complejo soja fue de poco más de USD 2.000 millones, a pesar del alza de los precios internacionales. De esta manera, a raíz de la gran retracción de la producción, la exportación se vio afectada y también toda la cadena comercial y logística, impactando negativamente en la economía nacional.
Con relación a los mercados, Argentina se volvió a posicionar como la principal compradora del grano con el 75% del total enviado, luego siguió Brasil, con el 17%, Rusia en un 8% y otros destinos de extrazona en mucho menor volumen, destacó Tomassone.
De acuerdo a lo que informó el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) en diciembre, para la campaña 2022/2023 Paraguay enviaría al mundo volúmenes inferiores a lo estimado inicialmente, con unas 100.000 toneladas menos.
El reporte de la UGP señala que la superficie de siembra de soja zafriña en la Región Oriental alcanzó 459.336 hectáreas, en tanto que en la entrezafra 2021 fueron cultivadas 122.544 hectáreas, es decir, un salto sustancial de 275%.